Tuesday, September 13, 2005

PGOU EL ESCORIAL: MEMORIA (INFORMACIÓN)

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ÍNDICE TOMO 1: INFORMACIÓN URBANÍSTICA
CAPÍTULO 1. MEMORIA DE INFORMACIÓN
1.-EL ESCORIAL. EL MUNICIPIO EN EL SISTEMA ESPACIAL DEL
REAL SITIO. HISTORIA Y DESARROLLO
2.- FINCAS HISTÓRICAS
3.- DESARROLLO HISTÓRICO Y ESTRUCTURA URBANA
4.- DEMOGRAFÍA Y ESTRUCTURA PRODUCTIVA
5.- EL ESPACIO RESIDENCIAL EN EL ESCORIAL
6.- EL ESPACIO ECONÓMICO
6.1.- SECTOR PRIMARIO
6.2.- SECTOR SECUNDARIO
6.3.- SECTOR TERCIARIO
7.- ANÁLISIS FUNCIONAL DE LOS CONJUNTOS URBANOS
7.1.- TEJIDO RESIDENCIAL
7.1.1.- Casco urbano de El Escorial
7.1.2.- Nuevos desarrollos en torno al casco
7.1.3.- Peralejo
7.1.4.- Navalquejigo
7.1.5.- Otros núcleos poblacionales
7.2.- TEJIDO INDUSTRIAL
7.3.- TEJIDO TERCIARIO COMERCIAL
7.4.- TEJIDO AGROPECUARIO
7.5.- TEJIDO DOTACIONAL
7.5.1.- Casco urbano de El Escorial
7.5.2.- Otros núcleos poblacionales
8.- EL MEDIO FÍSICO
8.1.- EL ESCORIAL EN LA UNIDAD ECOLÓGICA DEL
GUADARRAMA CENTRAL
8.2.- UNIDADES DE PAISAJE
8.3.- GEOLOGÍA Y GEOMORFOLOGÍA
8.4.- HIDROGRAFÍA
8.5.- VEGETACIÓN
8.6.- FAUNA
ANEXO I. INFORMACIÓN SOBRE LOS NÚCLEOS URBANOS

CAPÍTULO II. PLANOS


CAPÍTULO 1.- MEMORIA DE INFORMACIÓN

1. EL ESCORIAL. EL MUNICIPIO EN EL SISTEMA ESPACIAL DEL
REAL SITIO. HISTORIA Y DESARROLLO1.

Las bases del sistema espacial de El Escorial se vinculan de manera inseparable a la constitución y desarrollo del conjunto del Real Sitio del Monasterio de San Lorenzo. La potencia política, económica y simbólica del Real Sitio imponen al territorio circundante un conjunto de lógicas territoriales vinculadas sólo parcialmente a la especificidad del soporte físico que, no obstante, cobra un protagonismo si cabe más acentuado al incorporarse al mismo un conjunto de infraestructuras que acaban dando lugar a un conjunto absolutamente excepcional.

Con carácter anterior a la fundación del Monasterio, el territorio de El Escorial apunta vínculos históricos con desarrollos territoriales en épocas romana, visigoda y árabe, como algunos topónimos locales y la existencia de restos de calzada entre Zarzalejo y El Escorial (vía de la Machota) apuntan2. No obstante, se puede considerar inicialmente de cierta importancia el emplazamiento de núcleos poblacionales aldeanos hacia los siglos XI (reconquista) y XII (repoblación) vinculados a la Comunidad de Tierra de Segovia, núcleos básicamente aldeanos vinculados a la explotación ganadera del entorno. Un apeo de La Herrería, fechado en 1443, documenta por primera vez el topónimo de El Escorial3, aunque en este momento apenas se puede hablar de más que una adegaña dependiente de Robledo de Chavela.

Hacia 1503 aparece plenamente documentada la reciente independencia de El Escorial con respecto a Robledo de Chavela, integrado no obstante en el sexmo de Casarrubios, perteneciente a la Comunidad de Segovia4. El privilegio de villa no llegaría hasta 1565, otorgado por parte de la corona, ya dentro de la estrategia político-territorial vinculada a la construcción del conjunto palaciegomonacal.

La inmensa cantidad de bibliografía, documentación e información sobre el Real Sitio hacen imposible la referencia y la extensión sobre el tema. Una historia específica del municipio es Gregorio Sánchez Meco: El Escorial: De Comunidad de Aldea a Villa de Realengo, Ayuntamiento de El Escorial, 1995.

Existen restos romanos y visigodos de importancia secundaria en diversos lugares del término municipal, con grados diversos de identificación y datación. Se vincula el topónimo a las poblaciones de aesculus, como conjuntos arbóreos característicos (ver apartado de medio físico).
De manera poco más que simbólica, hasta el presente.

Con la elección del emplazamiento del Monasterio y el inicio de la construcción del mismo el último tercio del siglo XVI comienza un periodo de extraordinaria importancia para los dos núcleos poblacionales que comparten el territorio. En un principio surge una inicial diferenciación funcional entre el núcleo cortesano, base del actual San Lorenzo, y el verdadero pueblo que se constituye como unidad económica, centro de empleo y servicios, germen del actual El Escorial.

En este núcleo se construyen el Monasterio de Prestado, un nuevo ayuntamiento, hospital, y se desarrolla el conjunto urbano con algunas casonas de importancia y un buen número de fuentes y elementos urbanos. También, casi de manera simultánea a la terminación del Monasterio, se construye la Iglesia de San Bernabé, bajo el proyecto y dirección de Francisco de Mora.

Las grandes propiedades, cualquiera fuera su uso y tenencia, son adquiridas por la Hacienda Real y pasan a manos de los monjes jerónimos. Así, la Fresneda, el Campillo, Monesterio y la Herrería de Fuentelámparas, que no volverán a manos privadas hasta las desamortizaciones decimonónicas. Simultáneamente, otros núcleos próximos, Navalquexigo, Peralejo, Valmayor, cobran una importancia secundaria dentro del entorno.

A finales del siglo XVIII, un complejo conjunto de decisiones vinculadas a los alojamientos para corte y dependencias anejas al Monasterio, conduce al desarrollo del núcleo de lo que hoy es San Lorenzo, consumándose la segregación en tiempos de Carlos IV entre el núcleo “noble” y “la villanía”, que no obstante obtuvo el título de “leal” tras su comportamiento en la guerra penínsular de la Independencia.

Con la llegada del ferrocarril (tramo Villalba – Sanchidrián) en la segunda mitad del siglo XIX5 el municipio va a tener una segunda transformación radical. Por una parte se convierte en centro para la práctica del veraneo y tenencia de segunda residencia de la capital. Lo que comienza siendo un pequeño conjunto de asentamientos más que localizados en determinadas extensiones urbanas o parcelas y fincas muy concretas, se ha convertido, a lo largo del siglo XX, en el gran fenómeno urbano responsable del conjunto de disfunciones aparecidas en el municipio.

El trayecto Madrid – El Escorial se recorre por vez primera en 1861.


El Escorial ca. 1870. Fuente: Instituto Geográfico Nacional.

Pese al ferrocarril, este carácter lúdico ha impedido casi cualquier tipo de actividad industrial, con la notable y significativa excepción de la fábrica de chocolates de Matías López6. En 1864 se comienza a construir la Azucarera Refinadora, próxima a la estación, que no llegará a funcionar y que será traspasada al industrial chocolatero de la calle Tudescos de Madrid, que erige la nueva fábrica junto con un conjunto residencial para obreros a la manera de los conjuntos europeos más modernos. Incluso ésta y otras incipientes barriadas obreras se construyen bajo la influencia de las ciudades jardín europeas, adoptan modelos de cierta calidad y se incorporarán tempranamente al conjunto vacacional.

Puede consultarse Gregorio Sánchez Meco: Cuando El Escorial olía a chocolate, Ayuntamiento de El Escorial, s.d.


Azucarera Refinadora Fábrica de chocolates de Matías López


Situación de la fábrica


2. LAS FINCAS HISTÓRICAS.

Las cuatro grandes fincas históricas existentes en El Escorial, a saber, Monesterio, El Campillo, La Fresneda y La Herrería, encuentran su origen en los pequeños asentamientos vinculados a la ganadería generados en la zona en el siglo XII. Se trataba, en realidad, de unidades familiares de explotación prácticamente autosuficientes, cuyo espacio más singular es el herrén como lugar donde alimentar el ganado (prado) pero que queda integrado en la unidad de vivienda y huerta, siendo especialmente significativo que es de propiedad exclusiva de la célula de explotación. Sobre esta base de ocupación del territorio, las distintas unidades familiares constituirán por acumulación, pequeños enclaves de población cercanos entre sí que hicieron posible una estructura de caminos que los comunicaba.

El origen de la finca de La Herrería se remonta a la primera mitad del siglo XIII cuando debido al aumento de población y al incremento en el uso del terrazgo se hubo de deslindar dos espacios (la dehesa de Fuente Lámparas y la dehesa de las Ferrerías de Fuente Lámparas) para el uso específico del ganado y que se segregaron del común del espacio escurialense y se entregaron a un único usuario.

Es también a principios del siglo XIII cuando se entrega a un pequeño grupo de caballeros grandes espacios en el enclave de La Fresneda, haciéndoles propietarios de una tierras en donde desarrollarían una agricultura basada en la vid y los cereales.

Parece, sin embargo, que aunque los enclaves poblacionales fueran mucho más antiguos, es en el siglo XIV cuando quedan plenamente consolidados El Campillo, Monesterio, La Fresneda y El Escorial.

A mediados del siglo XVI, con la llegada de Felipe II y su corte el territorio escurialense sufre una nueva transformación. La Herrería y La Fresneda son adquiridas en 1563 para su explotación por parte de los monjes jerónimos y aparecen, desde entonces, vinculadas al Monasterio; mientras que El Campillo y Monesterio no son incorporadas a los terrenos del Monasterio hasta 1603, ya en el reinado de Felipe III, convirtiendo de esta forma en realengo un territorio que tradicionalmente había sido de señorío.

Durante los siguientes años cada una de las cuatro fincas adquirirá características propias ligadas tanto a su uso específico como a su posición sobre el soporte físico. La dehesa de La Herrería se convertirá en un bosque debido a su cercanía con respecto al Monasterio, que impedía realizar en sus terrenos cualquier actividad económica que pudiera romper la vida contemplativa de los monjes, quedarán acotados únicamente tres espacios para huertas, tres zonas de dehesa y los elementos ligados al aprovechamiento del agua del río Ausencia.

La dehesa de La Fresneda, también conocida como La Granjilla, se constituyó en espacio de reposo de los monjes jerónimos, para lo cual se construyó la Casa de los Frailes, al tiempo que la finca albergaba la Casa de su Majestad desde la segunda mitad del siglo XVI. Es, por tanto, La granjilla, un espacio más modificado por el hombre, incluyendo en su terrenos un jardín en las cercanías de las dos casas y una dehesa.

Con la adquisición de las dehesas de El Campillo y Monesterio, pasaron a manos de los monjes jerónimos dos inmuebles de época medieval que Felipe II había restaurado y que Felipe III encargó a los monjes de su mantenimiento: la Torre- Fortaleza de El Campillo y la casa-palacio de Monesterio. La explotación de estas tierras abarca tanto el uso ganadero como el aprovechamiento del abundante agua existente en ellas mediante molinos de harina y de papel, al tiempo que se construye un pozo de nieve para dotar al Monasterio de agua fresca y hielo.

3. DESARROLLO HISTÓRICO Y ESTRUCTURA URBANA

3.1. ESTRUCTURA TERRITORIAL

El desarrollo urbano y territorial de El Escorial ha estado, históricamente, ligado al del Monasterio. Antes de la implantación de éste, sólo existía una pequeña aldea muy mal comunicada pero bien situada en la red de caminos por la que circulaba el ganado trashumante, que más tarde se convertiría en una estructura vital para la economía del Monasterio.

Desde el último tercio del siglo XVI hasta finales del siglo XVIII se consolida la diferenciación funcional tanto urbana (entre el núcleo cortesano en torno a palacio y monasterio y el de la villanía o núcleo de empleo y servicios ligado a la corte) como territorial (contorno del Real Sitio y el territorio productivo circundante). El sistema territorial resultante, dominado por el coto cerrado y que en algunos casos como el de Campillo o Monesterio transforma una estructura rural en dehesa y bosque real de caza, plantea una estructura de redes que se superponen, y que se materializan en los sistemas de comunicaciones y el problema de abastecimiento.

La llegada del ferrocarril en el siglo XIX produjo una transformación radical que años más tarde se materializó en el desarrollo de la segunda residencia en el municipio, en un principio en lugares muy concretos y luego extendida a la totalidad del territorio. La expansión metropolitana y la mejora de las comunicaciones ha conducido en los últimos años a la sustitución de la segunda residencia por la primera.

De esta manera, la estructura territorial de El Escorial se entiende como la superposición de diversas redes más o menos lineales que corresponden o han correspondido a los espacios económicos que se han desarrollado en el municipio y que han sido influidas de forma decisiva por los distintos procesos históricos producidos en el mismo.

1.- Red de vías pecuarias, única preexistente a la construcción del monasterio y que sitúa a El Escorial como enclave privilegiado de la red de caminos de circulación del ganado trashumante. Ligada al espacio productivo y que no conecta ciudades ni pueblos, sino dehesas.

2.- Red de caminos (hoy carreteras) procedente de la evolución de los caminos tradicionales, cuyo origen se sitúa en el sistema de comunicaciones creado por Felipe II, tanto para conectar las posesiones reales con la capital como para el abastecimiento de la corte, dando lugar a una estructura territorial vinculada a la distribución y cuya importancia varía en función de los lugares que comunica.

3.- Red de aprovechamiento de recursos hidráulicos, tanto en su modalidad de captación para el consumo humano y de los animales como en la referida a los mecanismos para aprovechar la energía hidráulica, ambas con origen en la necesidad de dotar de abastecimiento a las propiedades reales y del monasterio. Constituida por una extensa red de arroyos y regatos afluentes de los ríos Guadarrama y Aulencia y por variados ejemplos de masas de agua de carácter permanente o semipermanente, tanto naturales como creadas por el hombre.

4.- Red del ferrocarril, con origen en el tendido ferroviario entre Madrid e Irún construido por La Compañía de los Caminos de Hierro del Norte de España en los últimos años de la década de 1850 y los primeros de 1860, es precisamente en 1860 cuando se produce la expropiación de las porciones correspondientes pertenecientes a los antiguos Bosques Reales de La Herrería y El Campillo y se construye la estación en los antiguos terrenos que Felipe II cedió a la Villa y que constituía el denominado ejido de la Regalada; y vinculado, al igual que la red de caminos, a la distribución y el comercio, situándose a El Escorial, de esta forma, en una red territorial mucho más amplia.

3.2. ESTRUCTURA URBANA

La estructura urbana de El Escorial queda determinada por su posición sobre el camino tradicional entre Madrid y el Monasterio de El Escorial y por la localización de la iglesia de San Bernabé y el Monasterio de Prestado al norte del camino, que hacen que la estructura del casco hasta el siglo XIX no responda a un modelo lineal en torno al camino a Madrid sino que se desarrollará de forma radioconcéntrica en torno a esos dos polos de atracción.

La vía del ferrocarril supuso a partir de 1860 una barrera al oeste de este primer asentamiento lo que, junto a la construcción de la Fábrica de chocolates Matías López al otro lado del tendido ferroviario favoreció un modelo lineal en torno al camino a Madrid, que aunque en un primer momento sólo se produjo al norte de éste, no tardó en situarse al otro lado del camino, al plantearse la colonia de Prado Tornero a finales del siglo XIX a modo de ensanche del casco tradicional y, más tarde, en torno al camino a Valdemorillo, lo que determina hoy una estructura urbana principal coincidente con ambas carreteras, de forma que la tradicional estructura territorial se ha convertido en parte integrante de la estructura urbana del casco.

Los diversos desarrollos producidos a lo largo del siglo XX han venido a consolidar este modelo parcialmente lineal vinculando la estructura principal a los caminos mencionados y desarrollando una estructura secundaria perpendicular a ellos que permite el crecimiento.

Casco urbano de EL Escorial entre 1860 y 1870


Casco urbano de El Escorial en 1927


Casco urbano de El Escorial en 1979


Casco urbano de El Escorial en 1991


Casco urbano de El Escorial en 1999


4. DEMOGRAFÍA Y ESTRUCTURA PRODUCTIVA.

El Escorial es actualmente un municipio de más de catorce mil habitantes (12.669 habitantes en 2003, según estadística de la Comunidad de Madrid) que se concentran en su mayor parte en el casco urbano y en sus alrededores. Sin embargo, casi un 30% de la población se distribuye entre el resto de asentamientos del municipio.

Podemos hablar de varios núcleos poblacionales en El Escorial claramente separados entre sí; encontramos un casco urbano proveniente del asentamiento más clásico que integra una estructura de casco tradicional con los nuevos crecimientos, más una serie de urbanizaciones de baja densidad sin ninguna conexión entre ellas ni con el núcleo original que o bien aparecen vinculadas a la estructura de comunicaciones (en este caso en torno a la M-600) como la urbanización Pinosol y las urbanizaciones Alcor I y II y El Ventorro, o como en el caso de las urbanizaciones de Los Arroyos, Las Suertes y Montencinar producto de la conurbación de los municipios de Collado Villalba, Galapagar y Guadarrama que se han extendido en un continuo urbano de uso casi exclusivamente residencial. Por último nos encontramos con dos asentamientos que provienen de los pequeños núcleos hoy anexionados al municipio de El Escorial: Peralejo que une su estructura de núcleo rural con los nuevos crecimientos del sur y Navalquejigo que se encuentra prácticamente abandonado y ha sido casi absorbido por las urbanizaciones cercanas al oriente del municipio.

Las transformaciones experimentadas por El Escorial en las últimas décadas se insertan en la dinámica de muchos municipios de la sierra madrileña que han pasado de tener un destino mayoritario de segunda residencia a formar parte del área de influencia de la capital, lo que hace que se observe una dinámica de crecimiento demográfico y de aumento de la primera residencia. Hasta principios de los años 90, El Escorial experimentó un crecimiento constante y sostenido de su población: de los 1.500 habitantes en 1900, pasó a tener 6.000 en 1981 con un crecimiento demográfico relativamente importante en los años 70.

Desde entonces, y en tan sólo veinte años El Escorial ha pasado de esos 6.000 habitantes a los 12.669 actuales y ha experimentado cambios importantes en su pirámide poblacional, que muestra cómo el aumento de población se corresponde en su mayor parte a la llegada de parejas jóvenes con o sin hijos al municipio desde los años 90. Este incremento de población ha ido acompañado de un aumento de la renta por habitante, que ha pasado de los 4.883 € en 1990 a los 8.166 € en 1999.

Fuente: Instituto de Estadística de la Comunidad de Madrid

En cuanto a la actividad económica, la dinámica en la estructura productiva conduce a la desaparición de la actividad del sector primario (ya en 1991 sólo un 3.8% de la población estaba ocupada en dicho sector, y las estimaciones hacen prever que ese porcentaje ha ido en disminución desde entonces) y a la terciarización de la economía del pueblo (un 54.8% de la población en 1991 estaba ocupada en el sector servicios y un 11.5% en la construcción).

Si a los datos anteriores le añadimos que sólo una pequeña parte de la población activa desarrolla su labor en el municipio, entendemos que la tendencia es que El Escorial sirva de residencia a personas ligadas al sector terciario que no trabajan en el municipio, lo que está teniendo una serie de consecuencias importantes no sólo en la estructura social y productiva sino también en el soporte físico.

5. EL ESPACIO RESIDENCIAL EN EL ESCORIAL

El aumento de la proporción de primera residencia en El Escorial que actualmente supera en casi todos los núcleos poblacionales el 50% (excepto en el caso de “Los Alcores”, Alcor I y II) no se circunscribe exclusivamente al casco urbano sino también a las urbanizaciones, prueba de ello es que en la urbanización Las Suertes la proporción de primera residencia alcanza el 65%. Las opciones residenciales para los nuevos habitantes del municipio se encuentran en las pequeñas promociones de vivienda que las ordenanzas actuales han permitido en el casco, en el entorno de la estación o futuras en Prado Nuevo, así como en el nuevo desarrollo de El Tomillar y el futuro Ensanche, o bien en las diversas urbanizaciones existentes que aunque en su mayor parte datan de los años 70 y 80 no tienen un alto nivel de ocupación. Debemos destacar con respecto a estas últimas que se trata de espacios residenciales cuya urbanización no siempre está consolidada, que en muchos casos carece de red de saneamiento e incluso de pavimentación. Son urbanizaciones que se caracterizan por la poca intensidad en el uso del suelo, la casi total ausencia de otros usos (tanto lucrativos como dotacionales) que el residencial unifamiliar aislado y responden a un modelo que lleva asociado un tipo de transporte específico: el vehículo privado; ello se confirma al analizar el parque de vehículos de El Escorial que casi iguala el número de turismos a la población en edad de conducir.

Fuente: Elaboración propia

Fuente: Ayuntamiento de El Escorial


6. EL ESPACIO ECONÓMICO.

6.1. SECTOR PRIMARIO.

Dadas las características del paisaje de El Escorial (se trata de una zona del piedemonte de la Sierra de Guadarrama, con singularidades) y la estructura de la propiedad (en grandes parcelas provenientes de las fincas reales que se mantuvieron íntegras aunque cambiara la titularidad tras la desamortización) la actividad del sector primario ha estado ligada tradicionalmente a la ganadería, mientras que la agricultura ha existido casi sólo en la medida en que se vinculaba a ésta en forma de pastos.

Hoy, aunque El Escorial se ha transformado en un municipio con base económica en el sector servicios y en la construcción, la actividad ganadera continúa teniendo cierta importancia, sobre todo la referida a la ganadería bovina de calidad ligada a la explotación extensiva del ganado, lo que queda confirmado con la existencia de tres mataderos en el municipio.

Fuente: Censo Agrario. INE

Según los datos del censo ganadero mientras que entre los años 1982 y 1989 hubo una clara disminución de la actividad ganadera no ha ocurrido lo mismo en la siguiente década, en la que se ha estabilizado y en algunos casos ha aumentado el número de unidades ganaderas.

En general, la actividad ganadera se produce en las grandes propiedades del municipio y es de carácter extensivo destacando el caso del ganado bovino destinado a la comercialización de su carne, actividad que junto a la distribución tiende a realizarse fuera del municipio.

6.2. SECTOR SECUNDARIO.

Debido a su localización en la Sierra madrileña, comarca que tradicionalmente ha estado más ligada al ocio que a la industria, la presencia del sector industrial en El Escorial ha sido tradicionalmente de dimensiones muy modestas, con la única excepción de la Fábrica de Chocolates Matías López que se situó en el municipio a finales del siglo XIX y cuyas instalaciones fabriles y la colonia destinada a sus obreros sobrevivieron hasta mediados del siglo XX en que fueron destruidas y sustituidas por el complejo residencial Prado Real.

Actualmente, la presencia industrial en El Escorial es muy escasa, destacando sólo el caso de la fábrica Reny Picot que se sitúa en el ámbito de desarrollo de El Ensanche.

6.3. SECTOR TERCIARIO.

Debemos tener en cuenta que aunque un porcentaje muy elevado de la población del municipio está empleado en el sector terciario una gran parte de éste no se refiere al terciario local, es decir, no afecta a la actividad económica del municipio. En El Escorial, el terciario dominante hace referencia al comercio y a la hostelería y tradicionalmente ha estado ligado a la presencia de la segunda residencia y al carácter estacional de la economía del municipio que se reactivaba en determinadas épocas del año.

El aumento de la proporción de vivienda principal en el municipio no ha constituido un cambio sustancial en la actividad económica de El Escorial, puesto que corresponde a un sector de población que no desarrolla su labor en el municipio. La presencia de asentamientos urbanos de uso exclusivamente residencial tampoco ha fomentado excesivamente el aumento de actividades terciarias ligadas al comercio o a la hostelería fuera del casco urbano o de Peralejo.

Siguiendo la dinámica de crecimiento demográfico, debido a un amplio sector de la población que no trabaja en el municipio se podría de manera razonable plantear la necesidad de conseguir el asentamiento de población cuya actividad sí radique en éste y consiga una reactivación de la economía del pueblo no sólo desde el punto de vista de los servicios sino desde el planteamiento de un sistema más complejo.


7. ANÁLISIS FUNCIONAL DE LOS CONJUNTOS URBANOS.

7.1. TEJIDO RESIDENCIAL.

7.1.1. Casco urbano de El Escorial.
El casco urbano de El Escorial se ha situado tradicionalmente en torno a la Iglesia de San Bernabé y a los dos caminos que unen la población con Madrid, quedando limitado al oeste por la línea del ferrocarril y la Casita del Príncipe. Originalmente este caserío se distinguía por la presencia de una mayoría de viviendas de 1 o 2 alturas construidas en piedra y con cubiertas de teja, que podríamos englobar dentro de la llamada tipología serrana del Sistema Central. Todas estas viviendas disponían de patios y edificaciones auxiliares y quedaban cerradas al exterior por medio de tapias, originando un tejido de trazado muy irregular cuyas manzanas se forman por la agregación de parcelas de formas y tamaños diversos.

Dentro del casco de El Escorial aún se conservan algunas de estas viviendas de tipología popular. Sin embargo, están siendo paulatinamente sustituidas por bien por edificaciones en bloque abierto alineado a viario que se caracterizan por el aumento del número de alturas y de la edificabilidad o bien por viviendas unifamiliares adosadas. Por otro lado en estas nuevas construcciones no existe un criterio claro que permita dotarlas de cierta homogeneidad ni en imagen (composición, tamaño de los huecos...) ni en materiales lo que provoca la destrucción del carácter tradicional del casco urbano de El Escorial sin que se genere a su vez una nueva imagen significativa y reconocible.


Distribución de manzana tradicional de casco

Distribución de vivienda unifamiliar adosada


7.1.2. Nuevos desarrollos en torno al casco.

Los primeros ejemplos de nuevos desarrollos en torno al casco urbano de El Escorial datan de los años 60, momento en que comienza el crecimiento hacia el norte tras superarse lo que tradicionalmente había constituido una barrera: la línea del ferrocarril. Dichos desarrollos se caracterizan por constituir urbanizaciones cerradas de bloque abierto de cuatro alturas o incluso cuatro más ático que se cierran a la ciudad mediante grandes espacios libres privados en torno a la edificación o interiores a ésta. Al norte de éstas urbanizaciones se ha desarrollado en estos últimos años el Plan Parcial de El Tomillar, que conjuga la manzana cerrada y el bloque abierto pero que presenta también cuatro alturas.

Nuevos desarrollos en edificación abierta

Nuevos desarrollos: Tipología de manzana cerrada en El Tomillar

El crecimiento del casco urbano hacia el sur ha tenido tradicionalmente un carácter distinto; ya en 1890 se planteó la colonia de Prado Tornero a modo de ensanche del casco tradicional de El Escorial y los desarrollos posteriores en la zona este y sureste del casco pertenecen también a este mismo tipo de vivienda, si bien en estos últimos años se han desarrollado promociones de vivienda unifamiliar adosada.

Nuevos desarrollos: Vivienda unifamiliar

7.1.3. Peralejo.

El núcleo de Peralejo integra un casco tradicional con los nuevos desarrollos; al igual que el casco de El Escorial, el caserío se caracteriza por la presencia de viviendas de 1 o 2 alturas de piedra y cubierta de teja, que en algunos casos aún conservan las edificaciones auxiliares y que se sitúan en torno a la iglesia de San Matías dando lugar a manzanas irregulares. Al noreste del casco se encuentra la urbanización Monte Abantos, cuya tipología de vivienda unifamiliar pareada ha favorecido su integración en la trama urbana del casco de Peralejo

7.1.4. Navalquejigo.

Navalquejigo es, al igual que Peralejo, un antiguo núcleo rural que quedó anexionado al municipio de El Escorial pero, a diferencia de éste, hoy se encuentra totalmente abandonado. Quedan restos de la plaza de toros y la iglesia se encuentra en un deficiente estado de conservación; con respecto al caserío original, el poco que se conserva está deteriorado por el abandono.

Manzanas de casco tradicional en Navalquejigo

7.1.5. Otros núcleos poblacionales

Los demás núcleos de población existentes en el municipio los forman urbanizaciones aisladas que se apoyan en las carreteras existentes, sin conexión alguna entre ellas ni con el casco urbano. Todas presentan una parcelación semejante, en origen vinculada a la segunda residencia aunque hoy esta opción suponga menos del 50% del total de parcelas ocupadas, que da lugar a modelos de baja densidad, de vivienda unifamiliar aislada y de uso exclusivamente residencial.

Pinosol: vivienda unifamiliar aislada Alcor I y II. Vivienda unifamiliar aislada

La única excepción está constituida por una serie de parcelas destinadas al uso residencial multifamiliar que se encuentran dentro de la urbanización Los Arroyos y que desde el momento de su construcción estuvieron concebidas como primera residencia. Se trata de grandes parcelas que contienen bloques de vivienda multifamiliar rodeados por un espacio libre privado que las aísla del exterior.

Vivienda colectiva en bloque abierto Vivienda unifamiliar aislada

7.2. TEJIDO INDUSTRIAL.

Actualmente apenas se encuentran ejemplos de usos industriales en el municipio siendo sólo destacable el caso de la Reny Picot, situada en el ámbito de El Ensanche y encontrando sólo un mínimo enclave de actividad económica al norte de la Avenida de Felipe II

7.3. TEJIDO TERCIARIO COMERCIAL.

El casco urbano de El Escorial recoge la práctica totalidad de la actividad comercial del municipio. En él se alterna el uso global residencial con usos compatibles de terciario comercial y hostelería en planta baja. Los nuevos desarrollos tanto de tipo unifamiliar como colectivo situados cerca del casco se sirven de los usos comerciales en planta baja de los edificios de vivienda multifamiliar del centro, de esta forma, para ellos, la accesibilidad al comercio aún es buena.

Un caso similar es el de Peralejo, que aunque a escala mucho más reducida también tiene ejemplos de terciario comercial y sobre todo hostelero en planta baja, del que en parte se sirven las urbanizaciones adyacentes, quedando, sin embargo, en este caso, muchas necesidades sin cubrir.

En cambio, el problema principal se plantea en el resto de núcleos de población, cuyo único ejemplo de uso terciario es un centro comercial de próxima apertura en Los Arroyos. Dado que el único uso en estas urbanizaciones es el residencial y en tipología unifamiliar se dificulta aún más la existencia de comercio. Es decir, para un 30% de la población de El Escorial, la accesibilidad al terciario está vinculada al transporte privado, puesto que las distancias no son adecuadas para ir a pie.

El problema cobra aún más importancia en el núcleo formado por Los Arroyos, Las Suertes y Montencinar ya que su tendencia natural es hacer uso del terciario comercial de Villalba, que se entiende más completo y es más cercano y no del de El Escorial, lo cual tiene repercusión en la economía del municipio.

7.4. TEJIDO AGROPECUARIO.

La presencia del uso productivo en El Escorial está ligada a la explotación ganadera y se sitúa en todos los casos alejada de los núcleos de población debido al carácter extensivo de la práctica ganadera existente en el municipio que vincula, por otra parte, el uso productivo agrícola a la ganadería en forma de pastizales.

7.5. TEJIDO DOTACIONAL

7.5.1. Casco urbano de El Escorial.

El casco urbano de El Escorial alberga la práctica totalidad de los equipamientos existentes en el municipio. De esta forma, la accesibilidad de los desarrollos en torno al casco es relativamente buena (aunque en la mayor parte de los casos está ligada al transporte privado o a una distancia que no siempre es accesible a pie), mientras que la de los núcleos poblacionales exteriores a él está siempre vinculada al transporte privado y en muchos casos es ajena a las dotaciones existentes en el término municipal.

-Zonas verdes / espacios libres.

En el casco de El Escorial encontramos dos tipos característicos de zonas verdes, unas integradas en el casco y de reducido tamaño y el parque de la Manguilla que situándose en el extremo suroeste del casco cumple las funciones de zona verde de grandes dimensiones de la cual pueden servirse tanto los habitantes del casco como los de los desarrollos existentes al sur de éste. Destaca entre las zonas verdes integradas en el casco el parque de Lorenzo F. Panadero, que sirve a modo de espacio de relación y socialización para dos franjas de edad muy determinadas: la tercera edad y los niños, mientras que los jóvenes tienen como centro de reunión la Plaza de España. Si bien la función de parque urbano queda cubierta por el parque de la Manguilla, se aprecia un déficit de zonas verdes o espacios libres de pequeña dimensión que se integren en las áreas casi exclusivamente residenciales tanto al norte como al sur del casco.

Zonas verdes y espacios libres en el casco urbano

-Equipamientos culturales. Cabe diferenciar en El Escorial los equipamientos culturales de carácter local de los elementos patrimoniales que, como la Casita del Príncipe, están más ligados al turismo y a la oferta cultural del municipio de cara al exterior. Respecto a los equipamientos locales, El Escorial cuenta con un centro cultural de reciente apertura y un centro multifuncional con biblioteca que parecen hacer frente a las necesidades de la población.

-Equipamientos sociales. Excepto un pequeño centro de servicios sociales ubicado en el antiguo centro de salud, todos los equipamientos sociales existentes en el municipio son de titularidad privada. El Hogar del Jubilado pertenece a Caja Madrid y es un centro que engloba actividades de ocio, una pequeña biblioteca y una cafetería. El número de socios es de 672 (lo que representa menos del 50% de la población mayor de 65 años del municipio) y se encuentra al completo, llegando incluso a tener lista de espera. Las tres residencias de ancianos existentes en el municipio son privadas y concertadas con la Comunidad de Madrid. Existe, por tanto, un déficit claro de equipamientos sociales en el municipio; hecho que, unido al análisis de la pirámide de población indica la conveniencia de planear centros destinados a la tercera edad.

-Equipamientos sanitarios. Existe en El Escorial un único centro de salud para todos los habitantes del municipio. Si bien la cercanía del Hospital “El Escorial” ubicado en San Lorenzo cubre gran parte de las necesidades sanitarias del municipio, se aprecia un déficit (sólo paliado por la existencia del Centro de Salud) de dotaciones sanitarias (consultorios) en los ámbitos de vecindario o barrio

-Equipamientos educativos. El Escorial cuenta con dos colegios públicos, un instituto y una escuela infantil también de titularidad pública. Parece, por lo tanto, que la oferta de equipamientos docentes se adecua a las necesidades actuales del municipio. Sin embargo, de cara al futuro habría que tener en cuenta la evolución de la población y el asentamiento de parejas jóvenes que en muchos casos pueden suponer un aumento de las necesidades de equipamientos educativos, sobre todo los que se refieren a Educación Infantil.

-Equipamientos deportivos. El polideportivo municipal (que cuenta también con una serie de instalaciones adyacentes al aire libre) constituye la única dotación deportiva pública de El Escorial, por lo que parecería necesario un aumento de las dotaciones deportivas del municipio

7.5.2. otros núcleos poblacionales.

Los demás núcleos de población existentes en el municipio se caracterizan por la ausencia casi total de equipamientos públicos, entre los cuales sólo podemos hallar espacios libres que en muchos casos no tienen consolidada la urbanización y cuya función ha sido ya asumida por el espacio libre privado o mancomunado. Las zonas verdes se incluyen en dos tipos fundamentales: zonas verdes de borde que tienden a separar el suelo urbanizable del no urbanizable y zonas verdes entre manzanas con carácter central.

Los Arroyos: Equipamientos privados Los Arroyos: Zonas Verdes

Debido a la ausencia de dotaciones públicas y al carácter específico de las urbanizaciones que estamos tratando, sí aparecen equipamientos privados de ocio privativos de cada urbanización (Club Social Los Arroyos, Club del Real Sitio, Club Social Pinosol).

De esta forma, el déficit dotacional existente en estos núcleos de población sólo queda cubierto por el servicio que ofrecen los equipamientos existentes en el casco de El Escorial o en el caso de Los Arroyos y Las Suertes, en Collado-Villalba.


8. EL MEDIO FÍSICO.

8.1. EL ESCORIAL EN LA UNIDAD ECOLOGICA DEL GUADARRAMA
CENTRAL

La provincia de Madrid comprende dos grandes zonas ecológicamente bien diferenciadas: una montañosa, al Norte, que corresponde al Sistema Central (Unidades Ecológicas de la Sierra), y otra que comprende el resto de la provincia, menos pendiente, que incluye las cuencas de los ríos Guadarrama, Jarama y Henares (Unidades Ecológicas de la Cuenca).

Este carácter dual de la provincia de Madrid se aprecia claramente a través de una simple aproximación paisajística. Así, de un lado nos encontramos con el Madrid serrano: aquel donde asoman los berrocales graníticos, y el de los inmensos depósitos arenosos que se extienden a los pies de la sierra. Y de otro lado, al Sur, nos encontramos con el Madrid de las mesas, con sus páramos de coberteras calizas cortadas por ríos jalonados de vegas, y el Madrid margoso y yesífero, con oteros y cerros de formas redondeadas y suaves. El primero es de suelos ácidos, pobres; el segundo de suelos básicos, ricos en nutrientes. Casi todo es diferente en estos dos madriles, el color de la tierra, las casas rurales, la actividad agrícola y ganadera, la flora, la fauna. El paisaje, en conjunto, es distinto.

Unidades de la Sierra

Somosierra-Ayllón

Guadarrama Central

Sierras Occidentales

Unidades de la Cuenca

El Pardo-Viñuelas

Area urbana y periurbana de Madrid

Campiñas de Brunete

Campiñas del Algete

Páramos y Vegas del Sureste


Grandes Unidades Naturales de la Comunidad de Madrid


Situado al oeste de la Comunidad de Madrid, el término municipal de El Escorial se encuentra ubicado en el primer gran grupo de unidades ecológicas, concretamente, en la Unidad Natural del Guadarrama central. Se sitúa en la zona que une las sierras de Guadarrama y Gredos en su vertiente meridional: las rampas de El Escorial-Villalba, que conectan el área montañosa con la depresión del río Tajo.

Es pues un paisaje de piedemonte en el que abundan las fresnedas, en las cuales es habitual el encharcamiento de grandes zonas y la existencia de humedales. Las zonas húmedas pertenecientes al municipio de El Escorial forman unos de los de los conjuntos de lagunas más extensos de la Comunidad de Madrid.

La importancia que tienen dichas zonas húmedas para la vida silvestre está dada por su localización, ya que se encuentran totalmente integradas en el paisaje y muy repartidas por la comarca, por lo que resultan de gran valor ya que ofrecen nuevas oportunidades ecológicas a los animales silvestres de la zona.

En el paisaje de El Escorial se alternan estas lagunas y humedales con encinares, melojares y fresnedas, mientras que en el suroeste del municipio, en la falda del monte Abantos, los pastos constituyen zonas de campeo de aves rapaces protegidas como son el águila imperial ibérica (Aquila adalberti), el águila calzada (Hieratus pennatus), el águila real (Aquila chrisaetos), el azor (Accipiter gentilis), el halcón peregrino (Falco peregrinus), el milano real (milvus milvus) o el ratonero (buteo buteo), lo que no sólo dota a la zona de gran belleza paisajística sino que hace que la conservación de su territorio sea imprescindible para salvaguardar el ecosistema de la comarca.

8.2. UNIDADES DE PAISAJE.

Dentro de las grandes unidades de paisaje de la Comunidad de Madrid, el municipio de El Escorial se sitúa en las llanuras de piedemonte que rodean las montañas y se asientan sobre los materiales resistentes del zócalo.

El paisaje de estas llanuras de piedemonte se caracteriza por la alternancia de berrocales y vaguadas húmedas, mientras que la tradición ganadera de los pueblos que en ellas se sitúan determina la dehesa como unidad de explotación que define la organización del paisaje y el funcionamiento del agrosistema. El paisaje queda definido por un territorio adehesado y latifundista que se vincula a la ganadería extensiva y en el que la explotación agrícola aparece casi siempre asociada a ésta.

La unidad de paisaje integrado a la que pertenece el municipio es la de la Rampa de El Escorial que se sitúa en las dehesas de transición entre la montaña y las campiñas. En ella los bloques de piedemonte están organizados internamente, divididos por fracturas importantes a las que se adapta el trazado de los grandes ríos que la atraviesan. Sin embargo, sobre este conjunto de bloques se han elaborado formas ligadas a procesos de alteración diferencial de las rocas graníticas que caracterizan el paisaje.


8.3. GEOLOGÍA Y GEOMORFOLOGÍA.

El Escorial se sitúa en un espacio de rampa entre la Sierra de Guadarrama y la depresión del Tajo y abarca más exactamente la cuenca del río Guadarrama. Es, por tanto, una zona de llanura que presenta una suave pendiente hacia la cuenca. La altitud media es de 900m. sobre el nivel del mar, oscilando entre máximos cercanos a los 925m. en las partes más cercanas al monte Abantos, y el mínimo de 870m., localizados en el valle por el que discurre el Arroyo Ladrón.

Desde el punto de vista geológico la rampa en que se sitúa constituye la unión de los materiales cristalinos de la Sierra y los materiales sedimentarios de la cuenca fluvial.

Desde el punto de vista geológico y geomorfológico, la rampa de El Escorial está constituida en toda su extensión por materiales graníticos, siendo la fisionomía más habitual el berrocal, es decir, la agrupación de todos los tipos de formas granitoideas como domos, bolos, crestas, lanchas etc formando cerrillos. Alrededor de los berrocales se sitúan grandes superficies de naturaleza granítica que han sufrido modificaciones, produciéndose un proceso de arenización o lehm, que se ha depositado en las áreas semihundidas llamadas navas.


8.4. HIDROGRAFÍA.

La zona de piedemonte en la que se sitúa El Escorial pertenece a la cuenca del río Guadarrama, que discurre con dirección norte-sur por el este del municipio coincidiendo con el límite del término municipal en su extremo noreste, quedando ubicados en El Escorial parte de los arroyos del Guadarrama y de su afluente: el río Aulencia, destacando el Arroyo Loco, el Arroyo del Ladrón y el Arroyo del Batán.

Sin embargo, las características geológicas del territorio permiten que la riqueza hidrográfica de El Escorial no sólo provenga de sus ríos sino también de sus humedales y aguas subterráneas. Encontramos en el municipio variados ejemplos de masas de agua de carácter permanente o semipermanente.

-Embalses (Valmayor, Embalses de La Granjilla). Formados por aguas dulces, permanentes y algo mineralizadas; de origen artificial, profundidad superior a los 2m y asentados sobre sustratos graníticos. Con población de rotíferos bentónicos, larvas de insectos, ácaros y moluscos en las orillas y diversas especies de peces en su interior en función de su tamaño y profundidad.

-Áreas encharcables y estancamientos de origen artificial (aguas estancadas de ríos, encharcamientos en canteras y albercas). Constituidos por aguas dulces, permanentes o casi permanentes y algo mineralizadas. Con población de invertebrados y plancton.

-Charcas y lagunas (El Castrejón, Las Radas). Formadas por aguas semitemporales, limpias y muy poco mineralizadas; con menos de 2m de profundidad cubeta y sedimento propio sobre materiales graníticos y condicionadas por las aguas subterráneas. Son producto del encharcamiento de las navas. Con profusión de vegetación acuática y con población de insectos, ácaros, gasterópodos y anfibios. En El Escorial su tamaño varía desde las 1,5 hA a las 0,4 hA.

-Áreas encharcables estacionales (con desarrollo invernal o primaveral). Formadas por aguas temporales, limpias y muy poco mineralizadas, con menos de 0,5m de profundidad, sobre materiales graníticos. Con abundante vegetación y fauna bentónica y de crustáceos.

-Charcas naturales y artificiales (pequeñas lagunas y balsas explotadas para uso ganadero). Formadas por aguas algo mineralizadas, semitemporales y turbias. Con escasa vegetación y población de insectos.

-Criptohumedales (prados húmedos presentes en vaguadas). Producidos por las descargas por evaporación a través de la vegetación de las aguas subterráneas. Forman paisajes muy peculiares vinculados al medio hídrico en zonas graníticas, son causa de aparición de arroyos importantes (Arroyo Loco, Arroyo de las Cebadillas) y tienen gran importancia como pastizales.

8.5. VEGETACIÓN.

Atendiendo a criterios corológicos y fitosociológicos, la Unidad Natural del Guadarrama Central pertenece a la región Carpetano-ibérico-leonesa, sector Guadarrámico, por lo que potencialmente pueden reconocerse en él dos pisos bioclimáticos distintos: piso mesomediterráneo y piso supramediterráneo, que darán lugar a series de vegetación específicas.

Vegetación potencial del territorio

1.- Saucedas (Rubo-salicetum atrocinereae)

2.- Fresnedas (Querco-Fraxinetum angustifoliae)

3.- Encinares (Junipero-Quercetum rotundifoliae)

4.- Melojares (Luzulo-Quercetum pyrenaicae)

-Piso mesomediterráneo


Temperatura media anual: 13-17º

Altitud: hasta 800-1000m


-Series climatófilas.

-Serie Junipero oxycedri-Querceto rotundifoliae sigmetum. Serie supramesomediterránea guadarrámica, ibérico-soriana, celtibérico-alcarreña y leonesa silicícola de la encina (Quercus rotundifolia). Encinares silicícolas de ombroclima seco o subhúmedo inferior. Faciación guadarrámica mesomediterránea sobre sustratos compactos.

-Piso supramediterráneo

Temperatura media anual: 8-13º

Altitud: desde 800-1000m

-Series climatófilas.

-Serie Junipero oxycedri-Querceto rotundifoliae sigmetum (24 a). Serie supra-mesomediterránea guadarrámica, ibérico-soriana, celtibéricoalcarreña y leonesa silicícola de la encina (Quercus rotundifolia). Encinares silicícolas de ombroclima seco o subhúmedo inferior. Faciación guadarrámica mesomediterránea sobre sustratos compactos.

-Serie Luzulo forsteri-Querceto pyrenaicae sigmetum (18 a). Serie supramediterránea carpetano-ibérico-alcarreña subhúmeda silicícola del melojo (Quercus pyrenaica). Melojares supramediterráneos de ombroclima subhúmedo. Faciación típica.

-Series edafófilas.

-Series riparias sobre suelos silíceos arenosos (Querco pyrenaicae- Fraxinetum angustifoliae, Rubo corylifolii-Salicetum atrocinereae). Fresnedas con robles y saucedas supramediterráneas.

Vegetación climatófila y edafófila

1.- Pinares

2.- Robledales

3.- Encinares

4.- Fresnedas

5.- Saucedas

Las series climatófilas están constituidas por encinares y melojares. Los primeros son encinares silicícolas sobre sustratos duros que se distribuyen en los dos pisos bioclimáticos del territorio hasta los 1.200m de altitud, los árboles dominantes son especies de hoja dura como la encina (Quercus rotundifoliae) y el enebro (Juniperus oxycedrus) que en El Escorial se sitúan en torno al Arroyo Ladrón y al Arroyo de la Fuente, entre los 870m y los 900m. La etapa de sustitución de estos bosques es un retamar (Retama sphaerocarpa) en el piso mesomediterráneo y un piornal de escobas (Cytisus scoparius) y otras leguminosas arbustivas (Genista cinerascens, Genista scoparius) y en el supramediterráneo un jaral de jara pringosa
(Cistus ladanifer).

En el piso supramediterráneo, en la banda altitudinal inmediatamente superior, tiene lugar un aumento de la precipitación media anual, que da lugar a la existencia de melojares (Luzulo forsteri-Querceto pyrenaicae ) que en el caso de El Escorial se sitúan entre el río Guadarrama y el Arroyo Loco. Sus etapas de sustitución son de escoba negra (Cytisus scoparius) y piorno florido (Genista florida) o bien un jaral de estepas (Cistus laurifolius).

Las series edafófilas dependen de la humedad edáfica y se distribuyen en función del tipo de suelo y su grado de encharcamiento, viéndose favorecida por la abundancia de zonas húmedas existentes en El Escorial. De esta forma, la fresneda es el bosque edafohidrófilo más característico de la comarca, extendiéndose por navas y otras zonas con tendencia al encharcamiento temporal y localizándose principalemente en El Escorial en torno al Arroyo Palenque, con una altitud media de 855m. Su etapa de sustitución está constituida por un espinar de rosáceas, con rosas (Rosa sp.), zarzamoras (Rubus corylifolius) y endrinos (Prunus espinosa). El uso tradicional que ha dado el hombre a este bosque añade un alto valor económico a su considerable riqueza biológica. El fresno y el melojo se utilizan para la obtención de madera y las hojas del fresno como alimento para el ganado vacuno en la época seca. Su ordenación en torno a las lindes de parcela (bocage), permite el desarrollo de su estrato herbáceo como praderas y pastos ganaderos.

-Vegetación acuática

Los numerosos humedales presentes en El Escorial albergan un tipo de vegetación muy particular constituida por plantas adaptadas a la vida acuática. La gran variedad de zonas húmedas favorece la aparición de muy diversas especies de vegetación acuática, vinculadas a la permanencia del agua, a la profundidad… En general podemos englobarlas en dos tipos de especies: hidrófitos (plantas acuáticas que florecen con todas sus partes vegetativas sumergidas en el agua) y helófitos (plantas anfibias que vivaces que florecen y desarrollan sus partes vegetativas en el medio aéreo mientras las basales están sumergidas). Una laguna permanente puede mantener todos los tipos de vegetación hidrofítica, mientras que una estacional, sólo puede ser colonizada por comunidades de vida efímera (Charion fragilis; Callitricho-Batrachion) y no permite el desarrollo de comunidades de las alianzas Parvopotamion y Magnopotamion.

8.6. FAUNA.

El característico paisaje de El Escorial, que alterna berrocales con zonas húmedas y su situación al pie de la Sierra de Guadarrama, ha posibilitado la existencia de una rica fauna en el municipio gracias al continuo intercambio de materia y energía entre los ecosistemas de la zona. Este flujo queda patente en los vertebrados superiores (aves y mamíferos) que desarrollan su ciclo vital en varios ecosistemas distintos, algunos de ellos presentes en El Escorial. De esta forma, aunque las zonas húmedas existentes en El municipio no sean el ecosistema característico de muchas especies, sí tienen importancia como recurso de reserva y como zona de campeo.

Entre los ejemplos más característicos se encuentran las rapaces: el águila imperial ibérica (Aquila adalberti), el águila calzada (Hieratus pennatus), el águila real (Aquila chrisaetos), el azor (Accipiter gentilis), el halcón peregrino (Falco peregrinus), el milano real (milvus milvus) o el ratonero (buteo buteo), aunque también otras especies se benefician de los humedales existentes en el municipio como la cigüeña negra (Ciconia nigra), gineta (Genetta genetta) o el gato montés (Felix silvestris).

Resulta de singular importancia para la alimentación de estas aves rapaces protegidas la presencia de pequeños vertebrados terrestres, anfibios y reptiles ligados a las zonas húmedas y a los pastizales, que debido a su posición al pie de la sierra se convierten en la zona de campeo habitual de las rapaces que habitan la Sierra de Guadarrama.

En épocas de máxima pluviosidad es frecuente la inundación de amplias zonas de pradera por saturación del manto freático. Muchas especies de anfibios y aves limícolas en paso como el avefría (Vanellus vanellus), el andarríos chico (Actitis hypoleucos) y la agachadiza común (Gallinago gallinago) utilizan estas zonas húmedas, que son de gran valos, pues en muchos casos permanecen inundadas del orden de cuatro meses, contribuyendo a la cría y reproducción de numerosas plantas y animales.

La importancia de las zonas húmedas de El Escorial desde el punto de vista de la fauna se confirma por la presencia de aves y mamíferos de gran valor, por hallarse en peligro de extinción y de colonias de cigüeñas como las de La Granjilla. Asimismo sirven de zonas de tránsito de otras especies como la garza (Ardea cinerea), que aumentan su capacidad de estancia en el medio gracias a las zonas húmedas. Además de los vertebrados superiores, los más beneficiados son los vertebrados inferiores y los invertebrados. La gran variedad de zonas húmedas, con características fisicoquímicas, extensión, profundidad, cantidad de materia orgánica, permanencia del agua etc, diferentes ofrece innumerables posibilidades para el asentamiento de variadas comunidades animales, con relaciones tróficas tan complejas como las de cualquier ecosistema evolucionado.


ANEXO I. INFORMACIÓN SOBRE NÚCLEOS URBANOS

Fuente: Servicios Técnicos municipales

Información Urbanística
PLAN GENERAL DE EL ESCORIAL. DOCUMENTO DE AVANCE.